Dolor y omisión: el ICBF tuvo que indemnizar a familias de niños abusados en jardines infantiles
Una tragedia que nunca debió ocurrir. Así califican muchas familias lo sucedido en el Hogar Infantil Corinto en 2017, donde 18 niños habrían sido víctimas de abuso sexual, maltrato y tortura a manos de un docente. El responsable fue identificado como Fabián Vivas, quien, según las denuncias, usaba su rol para acercarse a los menores con fines delictivos.
Las familias de los afectados demandaron al Estado, señalando al ICBF y a la Fiscalía por no haber actuado a tiempo. En 2024, el Tribunal Administrativo de Cundinamarca falló a favor de las víctimas y ordenó al ICBF pagar una indemnización de 200 salarios mínimos por cada menor afectado. También se ordenó reparar emocionalmente a padres, abuelos y hermanos, reconocidos como víctimas indirectas.
El caso puso en evidencia fallos graves en los protocolos de protección infantil y obligó al Estado a capacitar a sus funcionarios para prevenir que situaciones como esta vuelvan a repetirse. No obstante, de las 18 víctimas reconocidas en los informes, solo cinco familias fueron incluidas en la compensación directa.
Fabián Vivas fue asesinado en 2022, pero el dolor que dejó no ha sido olvidado. Mientras tanto, nuevas denuncias surgen desde otro jardín infantil del ICBF, esta vez en Bogotá, lo que mantiene alerta a las autoridades y genera preocupación en la ciudadanía.
