El Tribunal Superior de Bogotá ha puesto freno a lo que calificó como una afectación injustificada contra el buen nombre y la honra del excontralor Carlos Felipe Córdoba. En un fallo contundente, la justicia ordenó al periodista Juan Pablo Barrientos Hoyos rectificar las falsas acusaciones en su contra, luego de que este difundiera información sin pruebas suficientes sobre la legitimidad de sus títulos académicos y su tesis doctoral.
Durante el proceso, la Sala de Decisión Penal de Tutelas determinó que los informes publicados por Barrientos en Caracol.com.co, CasaMacondo.co y la red social X contenían afirmaciones inexactas que vulneraban derechos fundamentales de Córdoba. La sentencia no solo protege la reputación del excontralor, sino que también deja en evidencia cómo el ejercicio irresponsable del periodismo puede convertirse en un arma de desprestigio.
El tribunal fue claro en su fallo: Barrientos tiene un plazo de 10 días para rectificar públicamente sus publicaciones, asegurándose de utilizar formas lingüísticas condicionales, lo que sugiere que sus acusaciones no contaban con la solidez necesaria desde el principio. Esta medida busca no solo limpiar el nombre de Córdoba, sino también enviar un mensaje claro sobre la importancia de la ética periodística y la necesidad de manejar con responsabilidad la información que afecta la vida de terceros.
Carlos Felipe Córdoba, quien ha dedicado su vida al servicio público y a la lucha contra la corrupción, queda así reivindicado ante una campaña de desprestigio que pretendía manchar su trayectoria. La decisión del tribunal refuerza su imagen como un líder transparente y comprometido con la legalidad, mientras que deja en entredicho las verdaderas intenciones detrás de las acusaciones en su contra.
Este caso no solo es una victoria personal para Córdoba, sino también un precedente en defensa de la verdad y la reputación de quienes son blanco de ataques infundados en los medios de comunicación.
